Nuevas pistas sobre el síndrome del ovario poliquístico
Se trata de una disfución relativamente frecuente entre la población femenina. Este síndrome ovárico afecta al ciclo menstrual, incide en el normal desarrollo del embarazo, el equilibrio hormonal e incluso en el sistema sanguíneo. El síndrome del ovario poliquístico se manifiesta con un aumento del tamaño de los ovarios y está siendo estudiado desde hace años.
Ahora dos trabajos presentados en el marco del Congreso de la Sociedad Europea de Reproducción Asistida y Embriología celebrado en Ámsterdam, apuntan a que su origen podría estar en ciertas disfunciones cardiovasculares paternas. Este síndrome se manifiesta principalmente durante la pubertad y su incidencia está situada entre un 6% y un 10% de las mujeres.
Los síntomas aparecen durante la pubertad, incluso antes de la primera regla. Destacan la obesidad y el aumento del vello del cuerpo. En ocasiones, la mujer presenta cierto aspecto varonil, principalmente, en el pecho y la cara. Las menstruaciones suelen ser irregulares, con ciclos de 40 días o más algunos meses, e inexistentes en otros. Normalmente disminuyen las posibilidades de lograr un embarazo natural, lo que hace requerir tratamientos médicos para regular el ciclo reproductivo, así como técnicas de fertilidad asistida.
Ahora, gracias a un estudio de la Universidad de Adelaida, en Australia, se conoce que los hermanos de mujeres con este síndrome y resistencia a la insulina, tienen más probabilidades de desarrollar también resistencia a la insulina y diabetes. Ciertos alteraciones cardiovasculares de los padres producen modificaciones en el feto, que caso de ser una niña, desarrollará dicho síndrome.
El origen de esta enfermedad hormonal sigue siendo desconocido, por lo que el estudio se ha centrado en su relación con la producción de insulina, ya que las mujeres que la padecen suelen generarla en exceso. Actualmente es una enfermedad crónica y su tratamiento está orientado a reducir los síntomas. Las pacientes que desean quedar embarazadas deben primero controlar el sobrepeso y mediante el uso de hormonas son estimuladas para regular el proceso de ovulación. Solamente en casos más complicados se debe recurrir a la Fecundación In Vitro (FIV).