Los seres humanos durante nuestra vida, estamos expuestos a sufrir un sinfín de enfermedades tanto benignas como malignas. Entre las enfermedades benignas y que son controlables, se encuentra la gripe, el sarampión y la rubéola, entre otras. Entre las malignas y mortales están las enfermedades coronarias y el cáncer. Entre los diferentes tipos de cáncer uno de los más frecuentes es el de colon, también llamado cáncer colorrectal. Según estudios científicos el cáncer colorrectal es ocasionado por la formación de pólipos en el colon.
Estos pólipos malignos o pólipos de colon son masas de células que se forman y crecen en los tejidos que cubren las membranas del colon y se sujetan a ellas por medio de un pedúnculo (los mismos adoptan la forma de hongos). Se calcula que nueve de cada diez casos de cáncer colorrectal (CCR) se crean a partir de los pólipos.
Qué tipos de pólipos existen
Hay muchos tipos de pólipos, teniendo algunos de ellos la posibilidad de generar cáncer. Se clasifican según las características anatomo-patológicas (clasificación que realiza un médico experto al estudiar sus características microscópicas), su número (único o múltiples) y su tamaño. También cabe destacar que algunos pólipos en el colon pueden estar asociados a síndromes o enfermedades familiares hereditarias.
Síntomas de la presencia de pólipos en el colon
Si bien no hay registros que indiquen que la presencia de pólipos en el colon pueda detectarse por alguna sintomatología específica, a continuación les damos a conocer algunas señales de su posible presencia:
- Detectar sangre en las heces.
- Tener más de cincuenta años.
- Pérdida de peso sin motivo aparente.
- Ser fumador.
- Tener algún familiar que haya sufrido cáncer de colon.
- Beber alcohol.
Las señales antes indicadas “no necesariamente” son indicativas de la presencia de pólipos en el colon. La única manera de verificar su presencia es mediante una colonoscopia, examen que se lleva a cabo introduciendo por el ano un tubo largo y flexible provisto de una videocámara en uno de los extremos.
Pólipos malignos
El hecho de detectarse uno o varios pólipos en el colon no significa que los mismos sean pólipos malignos. Puede ser que una persona los pueda tener durante toda su vida de manera benigna, sin embargo, cuando se detectan, lo recomendable es extirparlos antes de que alguno o todos ellos se vuelvan cancerígenos.
Mientras se realiza la colonoscopia el médico tratante puede destruir los pólipos en el colon extrayéndolos de raíz. Estos pólipos son enviados para hacerles biopsias y si en las mismas se concluye que son cancerígenos se recomienda tratamiento con quimioterapia y/o radioterapia, dependiendo del grado y tipo de cáncer.
¿Cuándo someterse a una colonoscopia para detectar los pólipos en el colon?
Generalmente las recomendaciones médicas indican que las personas deben someterse a una colonoscopia en los siguientes casos:
- Cuando se detecte sangre en las heces.
- Cuando se es mayor a los sesenta años
- Cuando se sufre de problemas estomacales, de estreñimiento o diarreas frecuentes.
- Cuando han existido familiares que hayan sufrido de cáncer de colon.
- Cuando hay pérdida de peso sin razones normales.
Se insiste en que la detección de los pólipos en el colon se logra generalmente en exámenes secundarios y no necesariamente son cancerígenos, sin embargo, lo recomendable es proceder a eliminarlos de inmediato.